Reducir gastos no es tarea fácil, pero te podemos asegurar, que si sigues estos consejos tendrás mejor conciencia de tomar las riendas de tus compromisos variables y esos no tan necesarios.
1. Trabaja en los gastos hormiga.
Realmente no nos imaginamos el “hoyo” que puede generarle a nuestro presupuesto gastar, en refrescos, dulces, propinas y gastos que consideramos menores.
2. Deje en su casa todas las tarjetas de crédito.
Es sumamente fácil gastar cuando sabemos que llevamos medios de pago, sobre todo con saldo disponible, sin llevar un control previo y no saber si podemos o no comprar. Evitemos las tentaciones.
3. Vaya al supermercado con el estómago lleno.
Ir de compras alsupermercado con hambre puede significar que sus compras se incrementen, porque todo parece realmente necesario.
4. Lleve su almuerzo o cena a la oficina dos o tres veces a la semana.
Resulta costoso comer fuera de casa, no es que no lo haga, puede romper la monotonía pero de manera organizada y presupuestada.
5. Programe los gastos “principales”.
Los gastos más importantes deben programarse en el presupuesto como gastos fijos. En caso de ser urgentes, y no tiene el flujo necesario, convendría utilizar el fondo de emergencia que hemos construido con nuestros ahorros.
6. No abuse de las compras.
Las ofertas a meses sin intereses y más aún de las compras a mensualidades fijas que implican un costo financiero. Antes de tomar una obligación económica hay que verificar si tenemos capacidad de pago, sin afectar la salud financiera de nuestro bolsillo.